Entamoeba histolytica es el agente causal de la amibiasis, este protozoario, está distribuido en todo el mundo, pero las mayores prevalencias se reportan en América Latina, África e India. Las zonas con mayor endemia son los países tropicales y subtropicales, donde se presentan factores sociodemográficos y problemas de accesibilidad a los servicios básicos, tales como carencia de agua potable en la vivienda, hacinamiento y falta de redes de aguas servidas, así como con la pobreza extrema. Se han reportado actualmente alrededor de 500 millones de personas infectadas en todo el mundo de los cuales, el 10% presentan síntomas clínicos intestinales y del 2 al 20% extraintestinales, ocasionando una mortalidad que oscila entre 40.000 y 110.000 casos por año. Según la OMS representa una de las principales causas de muerte por protozoarios a nivel mundial, ubicándose en el cuarto lugar.
Este parasito fue reconocido por Lösh en un paciente con disentería en 1875 en San Petersburgo; sin embargo, el autor no estableció la relación causa-efecto entre la ameba y los síntomas del paciente. Koch, en el año de 1883, revisando autopsias, en una epidemia de cólera, demostró la presencia de las amebas en la submucosa de la pared intestinal, en los capilares cercanos a la pared de abscesos hepáticos y en el exudado de lesiones del hígado. A este autor se le considera el primero en afirmar que la ameba era el agente etiológico de la disentería tropical, y que el absceso del hígado era una secuela de la disentería amebiana.
¿Cómo te puedes contagiar?
Aunque puede presentarse en cualquier persona, la mayor incidencia como ya se menciono está en los lugares tropicales, con un deficiente saneamiento ambiental y clima cálido. La amibiasis se trasmite por medio de agua, alimentos, utensilios o directamente por vía oral cuando la persona infectada no se lava las manos después de ir al baño y la introduce en su boca, ya que el ser humano es el principal reservorio del parásito.
¿Cuáles son los síntomas de esta infección?
Aun cuando se conoce esta amplia variedad de manifestaciones clínicas de la enfermedad y la capacidad destructiva de los trofozoítos de E. histolytica en los tejidos afectados, sobre todo en el intestino grueso y en el hígado, todavía se ignora mucho acerca de los mecanismos intrínsecos de la amiba y los factores del hospedero que conducen a la producción de las lesiones.
La amibiasis intestinal puede ser asintomática o causar disentería o enfermedad extraintestinal, cuya forma de presentación más frecuente es el absceso hepático amibiano. Los pacientes con amibiasis intestinal sintomática o colitis amibiana refieren dolor abdominal tipo cólico de varias semanas de evolución, en ocasiones tienen pérdida de peso y diarrea, que puede ser acuosa con abundante moco y poca materia fecal acompañada o no de sangre, cuando ésta existe se habla de disentería amibiana.
¿Cómo es el diagnóstico clínico de la amibiasis?
Este se confirma mediante examen coprológico, generalmente con la confirmación microscópica de quistes o trofozoítos característicos en las heces. Sin embargo, la examinación microscópica tiene varias limitaciones la más importante es la inhabilidad de distinguir E. histolytica de E. dispar y E. moshkovskii. Además, con frecuencia las muestras fecales pueden presentar al examen microscópico quistes de otras especies tales como: Entamoeba coli, Entamoeba hartmanni, Iodamoeba butschlii o Endolimax nana, que pueden complicar el diagnóstico.
El desarrollo de técnicas moleculares como la Reacción en Cadena de la Polimerasa (PCR) ha permitido la diferenciación de estas especies. Esta técnica resulta de gran utilidad para estudios epidemiológicos y, por su gran sensibilidad, permite detectar casos que no han podido ser identificados al aplicar las pruebas convencionales, así como diagnosticar infecciones mixtas.
Sabiendo que uno de los elementos claves para el diagnóstico de este parasito, es el poseer microscopios que cuenten con la mejor tecnología posible, en Kalstein ponemos a su disposición, microscopios que le permitirán ofrecer un mejor análisis de heces. Por eso le invitamos a echar un vistazo a nuestras incubadoras disponibles AQUI